Acompañamiento/Mentoría social jóvenes migrantes
Surge de la necesidad de acompañar y apoyar los procesos de autonomía personal (inclusión laboral, tránsito a la vida adulta y emancipación, inserción sociocomunitaria) de jóvenes que por distintas circunstancias puedan encontrarse en una situación de vulnerabilidad social. Valoramos como positivos los resultados obtenidos en el acompañamiento individual a jóvenes que inician o que llevan a cabo procesos de emancipación.
Objetivos
- Apoyar y acompañar a jóvenes en situaciones de dificultad social en sus procesos de emancipación.
- Fomentar en los/as jóvenes el desarrollo de habilidades necesarias para la autonomía.
- Acompañar a jóvenes en su desarrollo dentro de la comunidad.
- Impulsar la autonomía vinculada.
Vida adulta
Es importante tener en cuenta que, las personas que participan en el programa lo hace de forma voluntaria y están inmersas en un proceso de autonomía con vivencias, experiencias previas, motivaciones y responsabilidades propias de la etapa adulta.
Perfil de las jóvenes
- Jóvenes migrantes de 18 a 30 años
- Se encuentran en situación de dificultad social.
- Tienen motivación para participar, se encuentran en un momento vital estable y asumen responsabilidad.
- Voluntariamente admiten el acompañamiento como forma de ayuda
- Carentes de referentes adultas/os positivas/o
¿Qué buscamos?
- Personas entre 28 y 60 años.
- Encontrarse en un momento vital estable.
- Personas responsables con disponibilidad de tiempo (1h 30min/semanalmente)
- Compromiso mínimo de 6 meses
- Participar en una formación inicial de 8-10 horas.
- Personas empáticas con habilidades sociales y comunicativas
- Personas adaptables y asertivas
- Personas con sensibilidad social, que promuevan la interculturalidad, el género y el respeto a los Derechos Humanos.
Inicio del proceso
- Este programa de acompañamiento social prevé atender a 10 jóvenes a lo largo del año.
- Aunque pasados seis meses termine el acompañamiento técnico, lo ideal es que la relación entre el/la referente y el/la joven se mantenga de forma duradera. Por este motivo, cada persona voluntaria sólo puede ser referente de un/a joven.
- Cada referente se compromete a mantener, al menos, una cita semanal de hora y media con el/la joven. Además, habrá una reunión mensual de todas las personas voluntarias con el personal técnico del programa para hacer seguimiento de los casos.
- Todas las personas voluntarias, antes de comenzar el acompañamiento, reciben una formación inicial de 8-10 horas.
- Es importante tener en cuenta que no todos los/as jóvenes están preparados para participar en un proceso de Mentoria, la voluntariedad de las dos partes es un factor decisivo para el éxito del proceso, ya que con este enfoque conseguiremos el compromiso, la responsabilidad individual y la confianza que requiere una relación de estas características.
- Finalmente queremos remarcar que la Mentoria como herramienta de intervención, ayuda a mejorar las condiciones para que los/as jóvenes puedan desarrollar con éxito un itinerario de emancipación, respetando siempre sus decisiones personales.
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